lunes, 18 de febrero de 2013

Si ya no podéis escribir

puede que sea el preludio de un cambio de forma. O de un cambio de tema. O de las dos cosas. O puede que sea, efectivamente, el preludio de la muerte de vuestra creatividad. Pero no podéis saberlo. No conoceréis nunca con exactitud a esa parte de vosotros mismos que os empuja a escribir. Sólo podréis conocerla bajo formas aproximativas y contradictorias. ¿Egoísmo o devoción? ¿Crueldad o compasión? Todo podría sostenerse. Prueba de que, finalmente, no sabéis nada; así que no os comportéis como si lo supieseis. Ante vuestra ignorancia, ante esa parte misteriosa de vosotros mismos, permaneced siempre honestos y humildes. (Michel Houellebecq)

No hay comentarios: