Pero yo he sentido lo difícil que era abrir los ojos y tener una imagen completa.
He entrado en la casa donde nací y que ahora es de otros
y he visto sus caras considerándome una intrusa,
salvo la de un niño de pelo lacio y ojos negros
que me ha reconocido.
Y he sentido nuestras bocas fundiéndose
con tal intensidad
que creía que estabas
sobre mi almohada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario